Nueva revelación del Profeta, Sacerdote y Rey Próspero Rico.

Apreciados hermanos:

Hace unos días, el Rev. Profeta, y aspirante a la suma posición apostólica, Noteo Antiteo, recibió un mail de su mentor Próspero Rico. En ese mail le pedía que con suma urgencia reuniera a todos los integrantes del Concilio Apostolar de Pino Solitario, compuesto por 77 honorables ancianos y, a la vez, que no se olvidara de invitar a la presidenta nacional del ministerio “Torta Frita Viuda de Sarepta” la hermana Ilusoria, ya que en sus reuniones no podían faltar, bajo ninguna circunstancia, las riquísimas tortas que la hermana preparaba para el Concilio.

La reunión fue fijada para el siguiente domingo. Esto, para que Noteo pudiera reservarle una habitación en el mejor hotel del pueblo, llamado “Cinco Rayos”, y a la vez pudiera, con tiempo, reservar su viaje en avión, ya que por la lejanía, eso reduciría el tiempo.

Es necesario detenernos aquí, para explicar algo muy importante. Primeramente, el Reverendo Rico sostiene que él, como "hijo del Rey" (no sabemos de cuál rey, claro) debe siempre viajar en avión. Como él es un neoapóstol del Tercer Mundo, y no un neolíder neoevangélico del Coloso del Norte (el que lee, entienda) no cuenta con jet personal o con una flotilla de aviones, para su uso y el de su familia y allegados. De modo que tiene que conformarse con viajar en primera clase (esta es condición sine qua non para efectuar sus viajes neoapostolescos).

El asunto mas importante para él está en viajar en avión aunque el mismo solo cubra el trayecto de una cuadra. Siempre que llega a un lugar, se ufana de que ha llegado a tiempo gracias a haber usado el dichoso avión. El resultado generalmente es el mismo: se puede entonces levantar la trigésimo primera ofrenda del servicio, ahora especialmente dedicada a los viajes "avionescos" de Rico.

En segundo lugar, la ciudad más próxima a Tartuerto, que contaba con aeropuerto, estaba ubicada a solo 55 kms. Así que Rico estaría viajando en avión 55 kms., y luego 1200 kms. por carretera para llegar a su destino: Pino Solitario.

A pesar de todas estas contingencias, la fidelidad de Próspero era evidente: 20 minutos antes de comenzar la reunión, allí estuvo. Justo a tiempo, para comunicar al Concilio Apostolar las nuevas directrices que había recibido por revelación en sus viajes a través del desierto patagónico y en las inexpugnables selvas amazónicas, y que habrían de regir al año próximo para toda la Iglesia Universal del Universo.

Justo, a las 10, el pastor Noteo comienzó la reunión. Después de cantar durante 20 minutos el coro lema conciliar “Me gozo en la Koinonía”, Noteo mandó a parar, tomó el micrófono y presentó a su mentor, el profeta, sacerdote, rey, apóstol, con su nuevo título de Arcángel Gabriel II concedido por ministración directa del profeta mayor del ministerio, Balaam ben Balac, el cual, por fuerzas mayores, no había podido acompañar a Próspero.

- Queridos hermanos, - comenzó Próspero - , ustedes se estarán preguntando en estos momentos sobre el por qué de esta reunión. Quiero testificarles que en unos de mis recorridos apostolescos por los desiertos patagónicos, recibí directrices directas del Arcángel Gabriel, y confirmados posteriormente en un recorrido por las selvas amazónicas por uno de los querubines celestiales, el cual no quiso darme su nombre aunque se lo rogué insistentemente. Pero lo más importante de todo es el mensaje. Recuerden que el mensaje recibido no solo es para decirlo y oírlo, sino para llevarlo a efecto, de lo contrario el juicio de Dios caerá sobre todos los que se opongan a las palabras que por revelación espiritual he recibido. En primer lugar quiero informarles que, de aquí en adelante, vamos a instaurar dentro de nuestro concilio el modelo llamado “De los cinco” o sea los D5. Todas nuestras Iglesias locales han de dividirse en grupos de cinco, o sea que si en una Iglesia hay 100 personas esas iglesia, en un santiamén se multiplicara en 20 Iglesias. Quiero que sepan que este es uno de los sistemas más revolucionarios y efectivos en el área de iglecrecimiento, que hasta ahora se han creado.

Mientras que Próspero hablaba, el Hno. Inocente se levantó y preguntó:

- Hno. Rico, ¿por qué 5, si ya estamos funcionado con 12? ¿Es que tenemos que cambiarlo todo ahora otra vez?.

- Querido hno. Inocente, quiero contestar a su pregunta. Ese sistema de 12 ya esta pasando de moda, y hay que crear otras cosas diferentes para poder seguir funcionando. "Los 12" es un sistema importado de otros países. Esto que yo he recibido por revelación es autóctono, y tiene sus bases bíblicas que voy a demostrar a continuación. A ver, ¿cuántos libros tiene el Pentateuco?

- ¡Cinco! - contestó la congregación.

- ¿Cuántos días pasaron antes que Dios creara al Hombre?

- ¡Cinco! - contestó la congregación.

- ¿Cuántos panes había para alimentar la multitud en el desierto?

- ¡Cinco! -contestó la congregación.

- ¿Cuántas líneas tiene un pentagrama?

- ¡Cinco! - contestó la congregación.

Inocencio, que parecía que era el único que razonaba, le volvió a preguntar:

- Hno. Rico, perdone, ¿qué tiene que ver el pentagrama en todo esto?

- ¿Cómo que qué tiene que ver? - contestó Rico muy enojado, porque como buen neolíder "cristiano" no soporta que lo cuestionen en lo más mínimo - Le pregunto yo a usted ahora: ¿cuántas notas hay en el pentagrama?

- Siete notas - respondió Inocencio, con mucha decisión.

- El siete es el número perfecto, por lo cual eso es más que suficiente para utilizarlo como base, porque el pentagrama, que tiene cinco líneas, contiene siete notas musicales, o sea la perfección, símbolo de la perfección de los D5.

Y luego se dirigió nuevamente a la congregación:

- ¿Cuántos discípulos tuvo el Señor?

- 12 - contestaron nuevamente los hermanos.

- Sí, pero no eran cinco,- replicó otra vez Inocencio, que no se había quedado satisfecho con la respuesta de Rico.

- Me parece que usted está cuestionando cosas espirituales que no entiende. - intervino en estos momentos el Rev. Noteo - Hno. Inocencio, si sigue cuestionando al siervo de Dios, vamos a tener que disciplinarlo duramente. De todos modos, el hno. Rico tendrá la bondad de explicar el misterio de los 12 en relación con los cinco, para que la congregación se dé cuenta de la perfección de las revelaciones que recibe.

- Fíjense bien y razonen, - continuó Rico - ¿no dijimos que el 7 era el número perfecto? Pues bien, a 12 réstenle 7 y vean a ver cuántos quedan?

- ¡Cinco! ¡Cinco! ¡Cinco! - repitió eufórica la congregación.

Hasta aquí llegó Inocencio con sus replicas. Si seguía hablando, le esperaba la disciplina; si no lo hacía, reventaba. Pues bien, el pobre Inocencio reventó, REVENTÓ ... REVENTÓ como un globo, porque no pudo resistir, según los cándidos hermanos, “el peso de la revelación”. El colapso cardiaco que lo mató fue adjudicado al juicio de Dios, por su rebeldía e incredulidad ante las revelaciones. Esto ocasionó que toda la congregación, como literal manada de ovejas literales, aceptara y aprobara el nuevo sistema que habrá de regir en Pino Solitario: los D5.

Pero no todo queda ahí. Fue tal la acogida que tuvo en Pino Solitario el nuevo Plan de "Iglecrecimiento", que ahora Próspero Rico se dedica a visitar a las iglesias de todos los países hermanos, donde muchísimos pastores del calibre de Próspero y de Noteo están "entendiendo" y aceptando la nueva revelación para cambiarlo todo, de nuevo, en sus Iglesias, y comenzar a trabajar en vez de con los 12, con los D5 porque, al fin y al cabo, como acota siempre, repitiendo como papagayo las palabras de Rico, uno de los pastores asociados: si a doce le quitas siete, cinco quedan.

Sin otro particular, me despido,

Teo.